Como he comentado en anteriores ocasiones la idea de la maternidad durante el embarazo mucho distaba de la realidad con la que me topé tras el nacimiento de mis hijos. No había tomado decisiones sobre su crianza. Así que dadas las circunstancias me dejé llevar por lo que sentía, por mis instintos. Pero he tenido la suerte de contar con personas, otras madres, que me han ayudado y aportado mucho.

En el hospital y con un post parto algo difícil conté con la ayuda de mi amiga de toda la vida, Lida, enfermera de Pediatría, que movió cielo y tierra para ayudarme con todo lo que estaba sufriendo. Su apoyo fue fundamental para mí para conseguir instaurar la lactancia materna.

Pasados unos meses me interesé por el funcionamiento de ABAM (Associació Balear d’Alletament Matern), asistí a charlas y reuniones y recibí mucha información. Allí fue donde se me abrió la puerta a conocer muchos más detalles del tipo de crianza que iba con mi forma de ser y sentir la maternidad; además me dio la oportunidad de formar parte de un grupo de madres que trabajan de forma voluntaria por y para ayudar en la lactancia materna.

Me enganchó tanto que acabé haciendo el curso de asesora en lactancia materna de ABAM, además formo parte como socia y acudo a todos los eventos que puedo. A mí personalmente me ayudaron mucho, especialmente en la segunda lactancia. He acudido también con amigas que igualmente necesitaban ayuda y hablado de la Asociación a mucha gente.

En ABAM fue dónde descubrí que no todas las mochilas de porteo son ergonómicas. Aunque con mi primer hijo ya era un poco tarde, embarazada del segundo asistí a un par de charlas y así fue como conocí a Teresa de Baby Tarta. Ella era la persona que impartía la charla.

Cuando supe que Teresa había puesto una tienda física, y cerca de casa, fui a comprar la mochila de porteo ergonómica.

Teresa es una persona muy amable y te asesora en todo lo necesario. He ido haciendo algunas compras y hemos contactado en diferentes ocasiones.

Desde que me animé a crear Mamá se escribe con amor, Teresa sido una referencia para mí. La sigo y me gusta leer lo que escribe. A raíz de unas fotos le conté mi proyecto y he recibido gran apoyo por su parte.

Poco a poco sin darnos cuenta vamos forjando relaciones con otras mamás que comparten tu manera de vivir la maternidad y criar a los niños. Y así me invitaron también a participar en un grupo de mamás de Facebook, donde aprendemos muchas cosas, nos desahogamos, empatizamos y compartimos múltiple información que resulta de gran interés.

 

Muchas han sido las mamás con las que he tenido contacto a lo largo de estos años.

Y todo en su conjunto me ha animado a compartir mis vivencias porque las otras madres nos aportan experiencia, nos proporcionan información, nos escuchan, nos apoyan y nos hacen sentir mejor porque al final de una u otra manera nos pasan cosas similares o vivimos experiencias semejantes.

Gracias a todas las madres que os habéis cruzado en mi camino, incluyendo la mía. Me habéis ayudado a convertirme en la madre que soy y quiero ser.

 



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